¿Y la luna?
- AnRos
- 21 may
- 1 Min. de lectura
"Dame un beso hoy, ahora..."
"No, luego, mañana, quizás..."
Y mañana fue solo una palabra.
Yo te regalé un cielo
Para que tú le pintaras una luna.
Pero luego, me dijiste que quisiste
Acatar el deseo de mi beso...
Y yo me estremecí, y me mecí
En la cuna dulce de la luna nueva...
Y, de pronto, la luna
Se ahogó en una sima de olas
Sin luz, ya también sin sol,
En un espanto nuevo y pavoroso.
¿Y qué será ahora
Un cielo ya sin luna?
¿Y para qué un beso
Engullido por el mar?
A veces se hace un poco tarde
Para poder brillar,
Aunque relampaguee la noche,
Aunque se esconda el sol.
Mañana pintaremos otra luna
Para recuperar un cielo,
Un beso
Y un adverbio.
AnRos
De nuevo los deseos imposibles - píntame una luna en mi cielo - pero satisfechos y la irremediable frustración se entrelazan en el alma de la poeta. El espanto que sigue al estremecimiento, el tiempo en que ya es tarde para todo y la esperanza de volver al paraíso perdido. La constante identificación de la luna con el amor a lo largo del poema -luna nueva, luna que se ahoga, cielo sin luna -, las preguntas retóricas que muestran el sinsentido del amor fingido, el desajuste entre la vida - que siempre nos ofrece una noche estrellada - y el tiempo del corazón. recorren el poema. Queda la esperanza de recuperar, al menos, las palabras de otro tiempo. Quizás sol…
Vaya luna más guapa, más gorda, más semiahogada y más bonita! Gracias: me veo reflejada en ella, cabalgándola, como a una foca vieja .